El número de hilos de las sábanas

En multitud de artículos de esta web aparecen los conceptos «número de hilos«, «cantidad de hilos» o recuento de hilos (también llamado conteo). Se trata de una métrica o indicador muy popular y todos tenemos la concepción de que a mayor número de hilos, mayor es la calidad de las sábanas y, por tanto, son mejores las sábanas con mayor cantidad de hilos. Nosotros no te vamos a contar que se trata de un mito, aunque sí pretendemos aclararte toda la «leyenda urbana» y los trucos que utilizan los fabricantes para vender sus prendas de cama.

¿Qué es el número de hilos en las sábanas?

El recuento de hilos es el resultado de contar la cantidad de hilos que tiene una tela en horizontal (hilos de trama) y en vertical (hilos de urdimbre) en una superficie determinada. Y aquí viene el primer problema: la mayoría de los fabricantes hacen alusión al número de hilos pero no indican en qué unidad de superficie.

Estándares

El estándar europeo determina que se deben contar el número de hilos en horizontal y la cantidad de hilos en vertical en una superficie de una pulgada cuadrada.

Sin embargo, el estándar australiano determina que el recuento se hace en una superficie de 10 centímetros cuadrados. Como puedes comprobar, una misma tela puede tener distinto número de hilos dependiendo del estándar utilizado.

El número de hilos de las sábanas depende del tipo de hilo

No se trata únicamente de la cantidad de hilos que tienen tus sábanas: el tipo de hilo utilizado para la confección de las sábanas puede tener influencia en el recuento de los hilos y, por tanto, en la determinación de la densidad de tus sábanas.

Una de las formas más comunes en que las marcas de ropa de cama inflan el recuento de hilos es utilizando hilos de varias capas y contando cada hebra de hilo como hilos separados. Y esto tiene su influencia, porque los hilos de varias capas utilizan hebras o cabos más finos y frágiles y, por tanto, son menos resistentes que los hilos más gruesos de una única capa o cabo.

A modo de orientación, unas sábanas de hilo de calidad no deberían tener más de 500 hilos por pulgada cuadrada. A partir de 500 hilos, puede pasar lo siguiente:

• Que el fabricante utilice hilos de varias capas para justificar el recuento de hilos.
• Que el fabricante utilice hilos monofilamento (de una única capa) pero que sean muy finos para que quepan en una pulgada cuadrada. Esto implica que las sábanas resultantes serán de telas de menor calidad, y menor durabilidad

También para salir de dudas, se dice que las fibras de algodón egipcio son más finas y largas. Y esto es muy cierto y permite al fabricante construir hilos un poco más finos, gracias a los cuales se fabrican esas sábanas de algodón egipcio tan deseadas por todos. Pero eso no se traduce en que se puedan fabricar sábanas de algodón egipcio de 1000 hilos sin que éstos sean multifilamento. El resultado serían unas sábanas demasiado densas y apretadas, muy rígidas y nada flexibles.

El tipo de hilo

El ejemplo de la derecha es ilustrativo: algunos fabricantes juegan con los cabos o hebras que tiene cada hilo a la hora de hacer el recuento de hilos. Algunos fabricantes multiplican por 3 el recuento de hilos argumentando que cada cabo o hebra cuenta como un hilo.

Por tanto, mucho cuidado con los datos que dan algunos fabricantes.

Como resumen, la afirmación de que a mayor número de hilos, mayor calidad de las sábanas es cierta hasta cierto punto. A partir de ahí, nos encontraremos con técnicas de marketing poco honestas o con sábanas hechas con hilos muy finos de baja calidad.

¿Cuál es la cantidad de hilos ideal para las sábanas?

La cantidad de hilos ideal para tus sábanas depende del tipo de sábanas que vayas a comprar, así como de las propiedades que necesitas que tengan tus sábanas.

En todo caso, la mayoría de expertos coinciden en que las mejores sábanas se encuentran en el rango entre 300 y 500 hilos. Asimismo, se consideran sábanas de número elevado de hilos a aquellas que están por encima de 400 hilos.

Las sábanas de elevado número de hilos son recomendables para aquellas personas que les gusta sentir el peso de las sábanas. Estas sábanas tienen más cuerpo y son más firmes y quienes descansen entre este tipo de sábanas se sentirán más arropados y más abrigados, por lo que pueden ser una gran opción para las personas más frioleras.

Estadísticamente hablando, hay más personas que se levantan por la noche por acaloramiento y sudores que por tener sensación de frío y, por ello, pensamos que las sábanas ideales y de gran calidad deben tener entre 300 y 400 hilos, lo que las hace más transpirables, más ligeras y flexibles y, sin embargo, mantienen el resto de propiedades de las sábanas con número elevado de hilos.

¿Cuáles son las principales características que miramos en las etiquetas de las sábanas?

Fundamentalmente:

• El material. Es un factor determinante sobre el comportamiento o las propiedades que tendrán las sábanas, que pueden ser de algodón, lana, lino, seda, bambú, poliéster.
• El tejido. La técnica de tejido influye también en el comportamiento: franela, satén, percal y raso son algunos ejemplos.
• El número de hilos. La cantidad de hilos es un indicador de la densidad utilizado únicamente para determinadas telas, pero hay otros como el momme para la seda o el peso para la franela o la coralina (g/m2)
• Color y diseño. Es un criterio que va en los gustos de cada consumidor.
• Precio. El precio es un factor importante a la hora de decantarnos por unos u otros modelos de ropa de cama.
• Certificados. Los certificados dan tranquilidad al usuario aunque no son garantía de calidad en sí mismos. Hay excelentes sábanas en el mercado sin certificados y otras muchas que, teniendo sus certificados, tienen una calidad básica.
• Recomendaciones del fabricante. Se trata de las pautas que facilitan los fabricantes para un cuidado óptimo de tu ropa de cama.

¿Qué propiedades o comportamiento queremos que tengan las sábanas?

En general, los compradores buscan los siguientes:

• La apariencia: colores más brillantes o mate, la caída que tienen las sábanas cuando están montadas en la cama, el lustre.
• La suavidad: más o menos suaves, tacto más o menos sedoso, más o menos deslizantes.
• La sensación térmica: que sean más o menos calentitas cuando las tocas o, por contra, que sientas más o menos frescor al contacto.
• La termorregulación: la capacidad que tienen las sábanas de mantener la temperatura corporal.
• La transpirabilidad: algunos compradores tienen tendencia al sudor o al acaloramiento y tendrán la necesidad de adquirir sábanas muy transpirables.
• Ecológicas. Es un factor fundamental para quienes están más comprometidos con el cuidado del medioambiente.
• Salud. Personas con sensibilidad cutánea, alergias u otro tipo de hipersensibilidades o afecciones de salud necesitan que las sábanas .
• Cuidado y mantenimiento: que no salgan pelotillas (antipilling), que no requieran planchado, que se puedan usar en lavadora y secadora, son propiedades que los usuarios demandan a la hora de comprar sábanas.

¿Qué influencia tiene el número de hilos sobre las propiedades de las sábanas?

Una vez enumeradas las principales propiedades que los usuarios exigimos a la hora de comprar una sábanas, vamos a contarte qué relación existe entre el número de hilos y dichas propiedades:

¿Cuál es el número de hilos que tienen las sábanas de mayor calidad?

Pues depende, porque en una misma superficie caben más o menos hilos en función del grosor de los mismos. Los hilos pueden ser más o menos gruesos en función de la fibra utilizada (algodón, seda, lino, bambú) y de las propiedades de la misma: la longitud, la finura, el rizado y otras muchas características de las fibras o filamentos.

Por ejemplo, las sábanas de lino son de alta calidad y, sin embargo, por sus cualidades, podrás encontrar sábanas con un número bajo de hilos, por debajo de 100. ¿Y por qué?. Porque la mayoría de la gente que compra sábanas de lino busca determinadas propiedades: que sean frescas, ligeras, transpirables, con un acabado más suelto. Y para que las sábanas de lino tengan estas cualidades tienes que recurrir a una técnica de tejido y un número determinado de hilos.

Asimismo, el número de hilos adecuado en las sábanas de algodón depende en parte del tejido con que se confeccione dicha ropa de cama. Sirvan como referencia los siguientes rangos:

En el caso de las sábanas de algodón percal, apreciadas por la sensación de frescor y respirabilidad que proporcionan, no es conveniente pasar de 350 hilos si queremos conservar dichas propiedades.

Bien es cierto que puede haber sábanas de percal de excelente calidad y que superen los 300 hilos pero sólo cuando se trata de percal de algodón peinado. El proceso de peinado produce los hilos de algodón de mayor calidad, resistencia y suavidad, siendo algo más finos que los hilos de algodón convencional. El resultado son sábanas muy suaves y finas al tacto, además de muy resistentes y duraderas.